Lavarte las manos

Con agua y jabón previene la propagación de gérmenes. El simple hecho de lavarse las manos evita el contagio de enfermedades.

Las manos nos permiten comprender el mundo que nos rodea, mediante ellas podemos reconocer la textura de un objeto, acariciar a nuestros hijos, sostener una cartera, cocinar, comer, jugar… A través del tacto incorporamos información y sustancias del medio ambiente aunque estas últimas pueden ser tanto positivas (alimentos), como negativas (patógenos, sustancias tóxicas). Es por esto que debemos tener un especial cuidado con la higiene de nuestras manos

Higiene personal y la salud

Desde que el hombre nace y entra en contacto con el ambiente comienza a relacionarse con elementos que le son totalmente ajenos y su sistema inmunológico se forma y fortalece lo cual lo prepara para afrontar futuras agresiones; sin embargo no siempre es posible salir airoso de estos enfrentamientos de ahí que aparezcan enfermedades causadas por virus y bacterias que han entrado a nuestro cuerpo. Es por eso que, durante siglos, los científicos buscaron la manera de evitar o disminuir la influencia desfavorable del exterior en la salud, luego de numerosos fallos encontraron la respuesta que perdura en nuestros días: una buena higiene.

Existen diversos tipos de higiene, desde la Higiene de los alimentos que garantiza el correcto estado de los productos que consumimos hasta la Higiene mental que atiende el perfecto desarrollo y funcionamiento psicológico de la persona y su comunidad; pero la higiene que nos interesa en este artículo es aquella que depende de cada uno de nosotros individualmente: la Higiene Personal. Y seguramente puedes pensar ¡Pero yo soy limpia! ¡Me baño todos los días! pues no basta solo con esto para hablar de una correcta higiene personal, sino que hay que tener en cuenta varios aspectos cuya importancia muchas veces no sabemos reconocer.